La receta original de Kimbo, que le abrió las puertas de los amantes del buen café de todo el mundo. Una mezcla sabia y armónica, con más tonalidades gustativas de las habituales en un café, gracias a la prestigiosa variedad Arábica de las plantaciones de Brasil, tostada según la antiquísima tradición de los maestros del café de Nápoles. De crema generosa y acaramelada, aroma intenso y sugerente y sabor exuberante, delicado y dulce, no acidifica ni amarga. Sus sutiles notas de chocolate enriquecen cualquier espresso y la hacen idónea para capuccinos y latte macchiatos. Y es tan deliciosa como versátil: te sorprenderá igual en cafeteras Express, Moka, de filtro y de goteo.